UTSAJU apela a la protección de los trabajadores ante la posible reducción horaria de los salones de Navarra

| 8 de enero de 2025

El debate sobre el proyecto de Decreto Foral de desarrollo de la Ley Foral de Juego en Navarra ha suscitado preocupaciones significativas entre representantes de la Unión de Trabajadores de Salones de Juego (UTSAJU), quienes advierten que la normativa podría resultar en el despido de alrededor de cien trabajadores en el sector. Durante una sesión en el Parlamento foral, el portavoz de UTSAJU, Carlos Sola, destacó que la nueva regulación establece horarios de cierre restrictivos, como la 1:00 a.m. para bingos y 0:30 a.m. para salones de juego, lo que podría afectar gravemente a los empleados, muchos de los cuales son inmigrantes y mujeres.

Sola enfatizó que el 80% de los trabajadores son inmigrantes y el 70% son mujeres, lo que pone de relieve la vulnerabilidad de este colectivo. Además, argumentó que la reducción de horarios podría incentivar el juego online, considerado un problema significativo. En este sentido, pidió a los parlamentarios que reconsideren las restricciones horarias y que se enfoquen en regular adecuadamente a los salones que incumplen las leyes, en lugar de penalizar a aquellos que operan correctamente.

Las reacciones de los parlamentarios fueron variadas. Marta Álvarez, de UPN, y Javier García, del PP, expresaron su preocupación por el impacto del decreto en los trabajadores, subrayando la necesidad de control en el sector. Miguel Garrido, de Contigo-Zurekin, sugirió que el control de horarios podría ser efectivo, pero cuestionó la justificación de las diferencias entre salones y bingos. Emilio Jiménez, de Vox, también mostró su preocupación por los posibles daños a los trabajadores.

Inma Jurío, del PSOE, abogó por encontrar un equilibrio entre la seguridad jurídica y la protección de los sectores vulnerables. Por su parte, Adolfo Araiz, de EH Bildu, y Blanca Regúlez, de Geroa Bai, coincidieron en que la limitación horaria debería aplicarse de manera uniforme y que falta justificación para la disparidad en los horarios.

El debate refleja las tensiones entre la regulación del juego y la protección de los derechos laborales de los trabajadores en un sector que enfrenta desafíos significativos.

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